domingo, 12 de julio de 2009

A la izquierda ¿la pared?

Hoy pensaba en la importancia de sostener un espacio independiente de centroizquierda, a la izquierda del kirchnerismo. Si, por un lado, creemos que esta estrategia es constructiva operativa y metodológicamente, y por otro, estamos convencidos de que es el modo de convocar a muchas voluntades que quieren cambiar la sociedad, esto significa que este espacio de centroizquierda tiene un sentido en sí mismo.

No ya en relación al kirchnerismo o a quien esté circunstancialmente en el gobierno, sino en cuanto a que es un espacio, y un modo de construcción de poder para el campo popular, que se agrupa alrededor de un núcleo duro, innegociable, más relacionado con valores que con contingencias. Y este espacio no puede ni debe dejarse vacante, sea por defección o por diluirse en alianzas con sectores más poderosos que terminan fagocitando lo construido.

Algunos de nosotros ya lo vivimos varias veces: en el 89 el PI desaparece cuando se alía con el menemismo triunfante; en el 99 pasa lo mismo con el Frepaso, diluido en la Alianza, maniatado y desactivado; entre 2005 y 2006 Barrios de Pie y otros movimientos sociales que integraban la alianza kirchnerista se abren antes de que les suceda lo mismo.

Estoy de acuerdo en que la prioridad es frenar el avance de la derecha. Pero no creo que la única manera de hacerlo sea aliarse con el kirchnerismo.
Mantener nuestra identidad de centroizquierda es un modo de construir poder para el campo popular, sin que necesariamente implique entrar en lógicas de construcción que no sólo no compartimos sino que sabemos que terminan dilapidando lo construido. A los hechos me remito.

Aparte, no me la creo. ¿Qué proponen, una transversalidad horizontal o que nos sumemos como comparsa? Ojalá la realidad me desmienta...

Esas son las razones prácticas. Pero también hay razones más filosóficas, si se quiere: mantener una posición clara y definida de centroizquierda no permite que se corra a la derecha el arco ideológico, cosa que sí sucedería si, como dijeron, a la izquierda de Kirchner está la pared.

¿La sociedad se corrió a la derecha? Puede ser, pero permítanme relativizarlo. Las cosas no "suceden", nosotros hacemos que sucedan. O que no.

Sostener la identidad desde la centroizquierda es poder articular, desde un lugar propio, apoyando o criticando si ataduras, sólo acorde a las coincidencias o disidencias. Pero también es plantar un mojón, un ancla, una marca. Que no sean posibles los deslizamientos; que no se puedan separar mucho de este núcleo de ideas sin que sea evidente para toda la sociedad.

No hay comentarios: